SociedadVilla de Las Rosas

Querer a Traslasierra es para gente sensible

Esa fue la definición de uno de los más de 120 concurrentes que concretaron la 2° Juntada del grupo “Traslasierra… un lugar en el mundo.

El sábado amaneció un día espectacular!

Casi que hasta podría suponerse que fue modo con que el clima adhería a la jornada… fue como que el sol brillaba para mostrar un valle luminoso a los visitantes que venían de distintos rincones de la provincia y de otras provincias.

Como gusta decir al  Sergio Vázquez, el cielo se presentaba “celeste prócer”.

Desde temprano los mensajes se sucedían en el grupo de Facebook en donde los miembros iban anunciando su proximidad a Villa de las Rosas o a la hora que habían partido desde sus lugares de origen, sumando expectativa a la espera de organizadores y lugareños que ya estaban acondicionando el Salón Comunitario de la Chacras.

Y comenzaron a llegar de a poco… Algunos reincidentes, otros por primera vez.

Y como pasa siempre la ceremonia del encuentro se realiza a plena algarabía, con abrazos y risas.

Luego llegó el locro y se poblaron las mesas, y aquellos que participaban por primera vez se encontraban personalmente con aquellos que durante tanto tiempo, chat mediante, vienen compartiendo su pasión esta región cordobesa.

Daniel Mazzoni, oriundo de Río Cuarto, es una asiduo visitante de la región y afirma que quienes “se arriman y se animan a querer a Traslasierra son gente sensible”


Sergio Vázquez
cumplió dedicadamente su rol de animador y con su guitarra paseó a los concurrentes por los diversos ritmos folclóricos para culminar con pasodobles y cuartetos interpretando piezas de colección como “A Villa Dolores”, memorable pasodoble del maestro Herlado Bosio, que describe una pujante Traslasierra de los años ’50 y ’60

Por su parte Gerardo Olmedo aprovechó para llenar su mochila con las imágenes que fue capturando en fotos durante la jornada.

No hay dos sin tres

Y así la tarde se fue apagando y con las sierras pintadas de cobre, se sucedieron las despedidas y promesas de reencuentro en una tercera juntada en la que, los organizadores, ya están pensando.

Carlos Fleitas, fundador del grupo, se pasó toda jornada con la “cara llena de juguete”. Es que la permanente secuencia de manifestaciones colmadas de afectos y camaradería, confirmaban la contundencia del éxito que tuvo aquella idea de aglutinar a los amantes del valle y que evidentemente superó con creces esas expectativas fundacionales.