Historias ChuncanasSan PedroVilla Dolores

Dolores y Pedro: Separados al nacer

Esta novela tiene su inicio hace 167 años cuando el gobernador Alejo Carmen Guzmán, firmó el decreto de fundación de una nueva Villa en el Valle de Traslasierra,más precisamente en el Departamento San Javier

(aún no se había delimitado el Departamento San Alberto).

Aún cuando Villa Dolores celebra el 21 de abril como día de su fundación, el decreto en cuestión es bien claro y preciso y en su artículo primero sentencia: “Fúndase en el Partido de Río de los Sauces Departamento San Javier, en donde se halla situada la Capilla de San Pedro, una Villa, que se denominará Villa de San Pedro.”  De este modo se fundaba, indubitablemente a la Villa de San Pedro. Y en el artículo 2 se nombra una comisión que será “encargada de la formación y dirección de la Villa” en la cual se designaban al “Jues de Alzada” del Departamento, “Don Ignacio Castellano, el Comandante General del mismo, Don Genaro Funes, del Jues de 1era Instancia del Partido Don Mamerto Gutiérrez y del ciudadano Don José María Castellano, presidida por el primero”.

Líos allá, líos acá

Para contextualizar el escenario socio-político en el cual ocurrieron estos hechos hay que decir que el país estaba padeciendo las tensiones de la organización nacional. Buenos Aires se había escindido de la confederación y la capital del gobierno confederal era la ciudad de Paraná. Por entonces el oeste cordobés soportaba los mismos avatares organizativos y asi lo reflejaba una carta que el Juez del Partido de Río de los Sauces Don Mamerto Gutiérrez remite a las autoridades provinciales el día 17 de enero de 1853. En la misiva, Gutiérrez no ahorra tinta para denunciar la inacción del Ministro de Gobierno, Agustín Sanmillán a previos requerimientos suyos. Es que Gutiérrez estaba pidiendo instrumentos legales que le permitieran fallar en los múltiples pleitos desatados, a ambas márgenes del Rio de los Sauces, a causa de la demarcaciones de terrenos y el uso del agua. No es difícil suponer que la preocupación del magistrado tenia que ver con el uso de la violencia con

que los enfrentado pretendían saldar sus diferencias. Dos mese más tarde la respuesta del gobierno fue la fundación de la Villa en donde no sólo de delimitarían claramente las propiedades y el uso del agua. Ya con el decreto del 21 de abril, la comisión designada comenzó a debatir las tareas a emprender y no tardaron en aparecer deferencias de criterios que, incluso contradecían el lugar de la fundación que mandaba el decreto. La capilla de San Pedro estaba en la banda norte del Río de los Sauces, no obstante algunos vecinos de la banda sur creyeron que ese el lugar más indicado el nuevo poblado.

Ni Cristo pasó de la Cruz…”

De inmediato se dio parte al gobierno provincial y esté respondió que los vecinos del lugar debían elegir el lugar más conveniente. Entonces los vecinos del Norte “patearon el tablero” y en un primer momento designaron a los Altos de Falcón (Alto de Castro) como el lugar donde trazar la plaza de futura Villa. Pero luego recibieron el ofrecimiento de una extensión de nueve manzana en el paraje Paso del León. Dice la tradición que cuando los comisionado inspeccionaron el lugar se oyó a don José María Castellanos la frase “Ni Cristo pasó de la cruz, ni yo de acá. Acá será la Villa”. Y así fue que se definieron por el Paso del León, en la banda sur.

Brizuela a pluma y sotana

Uno de los más aguerridos defensores de la posición de emplazar la nueva Villa en la banda sur fue el Pbro Juan Vicente Brizuela, que con autoritaria vehemencia aseguraba la conveniencia de la nueva propuesta argumentando que la banda norte era más susceptible a las inundaciones, que la cantidad de vecinos que habitaban la banda sur era muy superior, que la capilla de San Pedro era muy pequeña para albergar a los pobladores del nueva Villa, y otros argumentos de los  cuales el más curioso es el del inciso 13° de la carta que el sacerdote le envió Gobernador de Córdoba: “Y última, omitiendo otras muchas: que sólo el motivo de haber pedido los del Norte primero la villa en este punto no les da el derecho que alegan injustamente porque el no haberlo hecho los pobladores del Sud ha ido por estar diseminados en diversos puntos y que no podían reunirse para solicitarlo; además los del Norte han pedido en donde no debían pedir, pues el primer decreto del Sr. Gobernador dice que se elija el mero punto para que se forme una villa, y ellos sabían muy bien que en donde pedían eran lo peor” dicho esto a los pobladores del Norte les quedó más que claro que los del Sud estaban hablando de otra Villa, pues la capilla de San Pedro estaba en la banda norte. Es de suponer, además, debieron haber expresado su desagrado a las aseveraciones del Pbro. Es posible que de este enojo haya surgido la leyenda de la “Maldición del Cura Brizuela”.

No aclare que oscurece

Los años pasaron, las discusiones se extendieron y es en esta instancia en donde la historia vislumbra que que aquella Villa que hacia referencia en el decreto del 21 de abril de 1853, eran dos en la practica. Tal cual solía suceder con los nacimientos de mellizos cuando no existían las ecografías.

Como si fuera poco el mismísimo Alejo Carmen Guzmán le suma un elemento más a la histórica confusión. En efecto, mediante decreto del 4 de enero de 1854, cambia el lugar donde debía fundarse la villa en disputa y establece en su artículo 1° que “La Villa de San Pedro mandada a formar por decreto del 21 de abril del año ppdo. se fundará en la banda del sur del Río de los Sauces en el paraje denominado Paso del León.
Art 2°: Admitanse los donativo
s de dinero, terrenos, maderas, y demás útiles que ofrecen los vecinos en beneficio de la villa y para la construcción de la capilla”… o sea otra capilla más porque la San Pedro ya estaba construída. Es decir que mayor confusión se genraba entre los vecinos del norte y el sur enfrentados por la disposición en donde se debia establecer la nueva villa.

A pesar de tanto decreto…

El 21 de julio de 1855 en Gobernador Roque Ferreyra firma el decreto mediante el cual comisiona “al Agrimesor don José M. Casales, para que pase a delinear de nuevo dicha villa, faculatándolo ampliamente para que corte y decida toda disputa o cuestión que se suscitare, a fin de que los efectos de citado decreto se pongan en ejecución” El documento no disimula el fastidio gubernamental ante el tenaz desacuerdo entre los vecinos de la zona y es, literalmente, una invitación a “arréglensela ustedes.!

A pesar del decreto del Gobernador Ferreyra, del 27 de febrero de 1856, la Villa fundada en la banda sur del Rio de los Sauces, nunca se llamó San Pedro y ni su capilla de consagró a ese santo. En 1858 el Pbro Juan Vicente Brizuela trajo desde Catuna, La Rioja, la imagen de la Virgen de los Dolores que entronizó ese mismo año en la actual Basílica Menor. A poco la Villa del Paso del León cambió su nombre por el de su patrona: Villa de los Dolores.

Maldición no, ferrocarril.

Fundadas ambas localidades el mismo día y siendo erigidas casi al mismo tiempo, el desarrollo de ambas fue dramáticamente desigual.

Los viejos lugareños contaban que ello era consecuencia de una supuesta maldición proferida por el Pbro. Brizuela, (y también endilgada al Cura Brochero según la fuente). Pero más allá de esas pintorescas leyendas, lo cierto es que el progreso desigual no fue consecuencia de un conjuro sino de la llegada del ferrocarril a las tierras del banda sud del Río de los Sauces, convirtiendo a Villa Dolores en la punta de una línea que la vinculaba con localidades del noreste de San Luis, sur de Córdoba, y Santa Fe y Buenos Aires.

Que los cumplan feliz!

En noviembre de 1988, durante la gestión del Dr. Melchor Martino como intendente de Villa Dolores, se crea mediante Decreto Nro 634, la Comisión de Estudios Históricos la que tuvo «a su cargo determinar la fecha exacta de fundación de la ciudad«.

El 2 de marzo de 1989 el Dr. Martino firma el Decreto Nro 820 en donde se dan a conocer las conclusiones de la Comisión la que te determinó el 21 de abril de 1953 como fecha de fundación de la ciudad.

Hoy San Pedro y Villa Dolores celebran sus 164 años. San Pedro lo hace por primera vez con una serie de festejos que incluyó una vigilia.

Haciendo la analogía de los mellizos bien podríamos decir que luego de 164 años Dolores y Pedro, estos mellizo separado al nacer, celebran por primera vez juntos su cumpleaños.

N de la R: Hace algunos años (bastantes a decir verdad) dos jóvenes dolorenes idearon un programa que se emitía la por entonces única radio de FM sanpedrina. En el programa, Carolina, encarnaba a Dolores y Miguel a Pedro, dos niños que montados en sus triciclos recorrían las calles de ambas localidades descubriendo y describiendo la ausencia de obras de los respectivos gobiernos municipales. Esos geniales personajes inspiraron este texto.

Fuentes: Victor Barrionuevo Imposti – Historia de Villa Dolores – (1942)
Comisión de Estudios Históricos de Villa Dolores – Conclusiones – (1989)