Canonización del Cura Brochero

Un servidor de la causa de Brochero

El P. Ido Ricardo Ricotti nació en Villa de las Rosas (Dto. San Javier) el día 14 de enero de 1943 y falleció el 25 de julio de 2004 en Villa Cura Brochero.

A los 11 años ingresó al Seminario Menor de la Arquidiócesis de Córdoba, y luego realizó sus estudios de eclesiásticos en el Seminario Mayor de Nuestra Señora de Loreto.

El 6 de julio de 1968 fue ordenado sacerdote en la Parroquia de San Javier por Mons. Enrique Pechuán Marín, Obispo de Cruz del Eje y celebró, al día siguiente su primera Misa en el templo “Nuestra Señora del Carmen” en Villa de las Rosas.

Luego de un breve paso por la parroquia de Villa Dolores, con el P. César Ferreira viajan a Colombia para unirse al Equipo Misionero Latinoamericano que dirigía el P. Huelin S.J.. Así junto a los P.P. Romeo Saldigloria S.J. y Manuel Beltrán misionaron durante mas de un año distintas poblaciones rurales en Centroamérica.

De regreso a la provincia de Córdoba en 1970 fue párroco durante seis años en Serrezuela, luego diez años en la parroquia de San Javier y los últimos dieciocho años en Villa Cura Brochero.

Esta etapa de su vida lo identificó profundamente con la figura sacerdotal de José Gabriel Brochero y su Causa de Canonización.

El P. Ricotti, abrocherovenerablel mejor estilo brocheriano, llegó a todos los rincones de su extensa parroquia y más allá de ella. Fruto de esta acción nacieron los oratorios de “Jesús Misericordioso”, “Santísima Trinidad” y “Nuestra Señora de Schoenstatt”. La fiestas patronales de Nuestra Señora del Tránsito, precedidas de la Novena, con el Rosario de la Aurora y la visita a cada enfermo hicieron relucir el talante de este verdadero Pastor.

El “Salón del Peregrino”, construído en estos últimos años, es el lugar para los grandes acontecimientos de la vida del pueblo.

Los tres Encuentros Nacionales de Sacerdotes (1994,1999,2002) y los dos de seminaristas (1997,2001) tuvieron al P. Ricotti como principal animador y organizador.

El domingo 25 de julio cuando llegaron sus restos para ser velados en el Santuario de Nuestra Señora del Tránsito en Villa Cura Brochero los fieles colocaron a la entrada del templo un cartel que sintetiza los sentimientos agradecidos más profundos de ese pueblo, que decía:

¡Gracias Padre Ricotti!

Porque diste tu vida por nosotros

Porque cada día nos diste la Vida en la Eucaristía

Porque bautizastes nuestros hijos

Porque visitaste nuestros enfermos

Porque hiciste por lema de tu vida la hospitalidad

con tus hermanos sacerdotes,

con tu familia, con tus feligreses

Porque estuviste con los tuyos en el dolor,

el la alegría y en la soledad cada día y cada noche.

Gracias, gracias, gracias…

Intercede por nosotros.”

En días tan especiales para la feligresía brocheriana, desde Chuncania creimos justo recordar al amigo, de risa sonora, siempre solidario, que no dudaba en abrir generosamente su casa a los peregrinos.

Fuente: Curabrochero.org